Rafa Nadal inicia el cerco al número uno de Djokovic
El número uno no nos obsesiona. Preferimos ganar un Grand Slam a recuperarlo, pero al final una cosa lleva a la otra…”. Las palabras de Toni Nadal ayer resumen lo que viene a partir de ahora tras el triunfo de Rafa Nadal en Montreal, que le da 1.000 puntos, le coloca número tres del mundo y reduce su distancia con Novak Djokovic a 3.540.
Esos más de 3.000 puntos parecen un mundo, pero no lo son tanto porque el español no defiende ninguno hasta febrero del año próximo. Desde ayer, los dos coinciden en Cincinnati, donde el serbio fue finalista (600 puntos). Si Nadal gana el torneo con el de Belgrado en la final (1.000 puntos), el serbio ni ganaría ni perdería y Nadal saldría con 8.860.
Siguiente parada tras cumplirse esa primera premisa: desde el 26 de agosto se dirime el US Open donde Djokovic fue finalista (1.200). Si se da el escenario de que Nadal conquistara su segunda corona en Nueva York y Nole no pasara de cuartos, el número uno cambiaría de manos.
Son sólo hipótesis, y difíciles, pero radiografían la importancia que tiene el Grand Slam que viene y los tres Masters 1.000 (Cincinnati, París y Shanghai) que quedan, además de la Copa de Maestros. Todo ya pista rápida, donde el de Manacor se ha adjudicado Indian Wells y Montreal. Hasta febrero, tras el Abierto de Australia, Djokovic defiende la montaña de 6.310 puntos con el aliento de Nadal, liberado de defender, en el cogote.
Este año, después de estar lesionado siete meses, Nadal acumula ya ocho triunfos. Es decir, está al nivel de su segunda mejor temporada, la de 2008. Sólo en 2005, la campaña en la que explotó, consiguió un mayor botín con 11.
