Otras Selecciones

Edgar: “Canadá necesita clasificarse para un Mundial”

2771128_full-lndEl mediocampista defensivo de Canadá está convencido de que este es el momento correcto para alcanzar la Copa Mundial de la FIFA™ y sacar partido de la base de aficionados que la Copa Mundial Femenina de la FIFA demostró que posee el país.

El jugador de los Canucks habla con franqueza sobre la selección nacional masculina de su país, que actualmente se prepara para la siguiente ronda de clasificatorios para la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018, y asegura que tiene que subir el listón.

Edgar confía en emular los éxitos del combinado femenino de su nación, que ha venido cumpliendo regularmente con las altas expectativas del fútbol canadiense: “La selección masculina tiene que empezar a conseguir los mismos resultados, porque la base de aficionados está ahí”, insiste el mediocampista, de 28 años. “Avanzamos en la dirección correcta, pero tenemos que clasificarnos, no podemos quedarnos a las puertas nunca más”.

Con cuatro puntos anotados en sus dos primeros partidos, los cimientos ya están puestos. Desde que la selección se clasificó para su único Mundial en 1986, un año antes de que Edgar naciera, la repesca intercontinental contra Australia en la edición de Estados Unidos 1994, que los canadienses perdieron a los penales, ha sido el único momento en el que Canadá ha estado cerca de conseguir su segundo pase a la fase final.

Sin embargo, el crecimiento del fútbol en Canadá promete mucho. Actualmente, lo habitual es disponer de jóvenes talentos formados en el propio país, mientras que, para Edgar, el único camino hacia el éxito pasaba por Europa. Por suerte para este oriundo de Ontario, su pasión por el fútbol tenía sus raíces en Inglaterra.

Su padre, un guardameta que jugó en el Newcastle United, entre otros clubes, y su madre nacieron en el noreste de Inglaterra. Edgar jugaba con gran talento al hockey sobre hielo y al fútbol, por lo que tuvo que decidirse entre dedicarse al principal deporte del país o decantarse por seguir la tradición familiar en los Magpies.

Unas vacaciones de verano en Inglaterra persuadieron a un Edgar de 13 años de que lo suyo era el fútbol. La oportunidad de fichar por el Newcastle, la gran pasión de su familia, terminó de convencerle. A continuación, regresó a tierras inglesas, donde se quedó a vivir con su abuela y no tardó en adaptarse a la vida del norte del país.

Artículos relacionados

Back to top button