Bengtson se unió a la Bicolor
Tres aspectos a destacar en el entrenamiento vespertino de la selección nacional. En primera instancia la presencia de Jerry Bengtson quien llegó directamente a ponerse el “Over- all”.
El jugador llegó con toda la disposición del caso, se integró a un grupo que siempre lo recibe con los brazos abiertos porque sabe que él fue parte del objetivo llamado clasificación al mundial.
El atacante sabe que a pesar de llegar con bajo ritmo de juego con su equipo el New England Revolution, acá encuentra el espacio que tanto desea en un grupo que está bajo el mando de un entrenador que cree en él.
Aunque ayer hizo poco fútbol, y tampoco es que había volado tantas horas de un estado a otro para llegar hasta el sitio de concentración, pero lo poco que hizo le sirvió para soltarse.
En general, el equipo trabajo poco con el balón haciendo uso de sus piernas, más fue algo anaeróbico porque jugaron durante un buen tiempo “Hand- Ball” en corto espacio de la cancha.
Mucha dinámica, pareciera que no es nada provecho porque no se le vea al grupo jugando el balón con sus piernas, pero siempre se alcanza sacarle provecho mediante la reacción, el resorteo entre otros detalles.
Hubo un rato de fútbol en espacio reducido por el término de unos 15 minutos, lo cierto que el programa diario de trabajo contempla una hora, lo que basta para ir logrando los resultados de manera progresiva.
La tarde fue más desgastante para los guardametas, porque en extremo de una de las dos canchas que hay acá, estaba Marcelo Scalessi con Noel, Donis y “Buba” López exigiéndolos.
Al final del entrenamiento, una buena cantidad de aficionados que presenció los trabajos, no dudaron en tomarse fotografías con muchos de los jugadores.
Instantáneas, autógrafos en camisetas y banderas, es lo que lograron ayer los catrachos que se acercaron hasta el seleccionador, Luis Fernando Suárez.
